En Venezuela hay balas para todos
Un estudio realizado por Reacin y Monitor de Víctimas revela cómo Caracas, la capital de Venezuela, registra una gran cantidad de muertes por “balas perdidas”. Entre 2017 y 2021 unas 165 personas perdieron la vida al ser alcanzadas por proyectiles que tenían otro destino. Esta cifra no incluye los datos de centenares de personas que resultan con lesiones que cambian su vida producto de estos hechos. Una de estas historias está relatada en el documento
El informe también hace referencia a una investigación elaborada entre 2014 y 2015 por Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC), que ubica a Venezuela en el cuarto lugar entre 25 países de la región con más muertes por “balas perdidas”. En ese contexto, la socióloga Andrea Chacón, autora del documento, asegura que no se les debe llamar balas pérdidas, porque “la (bala) que hiere o mata, aunque sea a la persona equivocada, es una munición que cumple su propósito”
Las balas perdidas pueden alcanzar a cualquier persona. Pero como suele ocurrir con las víctimas de las violencias, aquellas personas que están más expuestas a sufrir una lesión o muerte por su alcance, son también víctimas de violencias estructurales como la desigualdad y la exclusión, lo que finalmente trae como consecuencia que esas balas terminan profundizando las vulnerabilidades.
En esta investigación denominada Consecuencias de Balas (NO TAN) Perdidas: Un acercamiento al contexto de las víctimas directas e indirectas de balas perdidas en Caracas, decimos que NO son balas TAN perdidas debido a que, finalmente, las balas están hechas para herir o para matar (más allá de si fue intencional o no).
La que hiere o mata, aunque sea a la persona equivocada, es una munición que cumple su propósito. Por tanto, al ser una mercancía que causa letalidad, su simple comercialización y circulación implica un riesgo latente que exige ser controlado y regulado por el Estado.
Este informe elaborado por Andrea Chacón, socióloga e investigadora de Reacin (Red de Activismo e Investigación por la Convivencia) muestra la situación de muertes ocasionadas por balas perdidas en Caracas a partir de los datos recolectados por Monitor de Víctimas (una plataforma de periodismo de datos de el medio digital Runrun.es y Mi Convive) entre 2017 y 2021, y las historias de algunas de las personas que murieron de esta manera.
Además, este contexto de datos se complementa con los casos de personas que quedan lesionadas producto también de estas balas perdidas. Por esta razón, el documento incluye el testimonio y la mirada de una madre que lucha cotidianamente con todo lo que implica que su hijo haya sido lesionado por una bala perdida a los 7 años, en 2013.
El Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC) puso la lupa sobre aquellos lugares de la región con mayor incidencia de balas perdidas. De los 25 países estudiados por UNLIREC entre 2014 y 2015, los que reportaron mayor número de incidentes fueron: Brasil (197 incidentes de un total de 741 casos registrados en los 25 países estudiados), México (116), Colombia (101 y Venezuela (70).
Sin embargo, al contrastar el número de incidentes con balas perdidas en relación con los tamaños poblacionales de cada país, Venezuela destaca como un lugar de intensa incidencia en la región latinoamericana, ya que estamos hablando de 70 casos en un país de unos 30 millones de personas, comparado con el caso de Brasil: 197 casos en un país de más de 200 millones de personas; México: 116 de casos en un país de más de 120 millones y Colombia: 101 casos en un país de unos 50 millones de habitantes.
Por otra parte, los datos sobre Venezuela quedaron pálidos, luego de analizar las cifras de Monitor de Víctimas para la elaboración de este informe: revelan que entre 2017 y 2021 murieron 165 personas solo en Caracas, al ser alcanzadas por balas perdidas.
Cualquiera puede suponer que las lesiones o muertes a causa de las denominadas “balas perdidas” son un tema de interés en el contexto de un país como Venezuela, donde frecuentemente ocurren enfrentamientos entre distintos tipos de actores armados (estatales y no estatales).
Son ellos quienes disparan balas que pueden tomar cualquier rumbo: los cuerpos de aquellas personas con las que se enfrentan, o cuerpos ajenos a la disputa, pero que estaban en un lugar y en un momento trágicamente desafortunados.