Dos de los muertos fueron identificados como Efraín Hernández Navas, de 18 años de edad, y Enrique José Gregorio Elias, de 24 años

FRANCISCO ZAMBRANO @franzambranor

Cuatro cadáveres fueron escoltados por comisiones policiales durante sus respectivos traslados de la morgue de Bello Monte a cementerios en Caracas, el pasado miércoles 1° de junio, de acuerdo con el testimonio del familiar de una de estas víctimas.

En la modalidad que se lleva a cabo cuando una persona muere en un presunto enfrentamiento con fuerzas de seguridad del Estado, iba el cuerpo de Efraín Alejandro Hernández Navas, de 18 años de edad. 

Un pariente, que prefirió no identificarse por temor a represalias, dijo que junto a Hernández Navas fueron asesinados otros tres hombres, el pasado 26 de mayo, a las 4 de la tarde, en un sector del barrio Las Mayas, en la parroquia El Valle.

Se pudo conocer que uno de los sujetos respondía al nombre de Enrique José Gregorio Elias, de 24 años. De los otros dos no pudo obtenerse identificación. 

El familiar de Hernández Navas aseguró que este fue secuestrado de su residencia en Las Mayas y ejecutado por funcionarios del Cicpc en una zona cercana. Presentó un disparo en el tórax. Era el menor de cinco hermanos.

De acuerdo con un informe presentado esta semana por Monitor de Víctimas, en 2021, la letalidad policial fue el principal móvil de los homicidios que ocurrieron en Caracas. De 544 muertes, 185 (33,8 % del total) se atribuyen a los cuerpos de seguridad del Estado, bajo las categorías de resistencia a la autoridad y ejecuciones extrajudiciales. El Cicpc fue el organismo más señalado, con 83 víctimas. 

Mataron a gruero en San Agustín

También en la morgue de Bello Monte, familiares de Luinyerber Rodríguez, de 27 años, informaron que, presuntamente, miembros de la Dirección de Investigaciones Penales de la Policía Nacional Bolivariana, lo mataron en la madrugada del 1° de junio.

Una mujer, que pidió no ser identificada, dijo que los funcionarios acudieron a la residencia de Rodríguez, a las 2:00 am, en el sector El Mamón de San Agustín, en Caracas, y lo asesinaron luego de amedrentar a su pareja y a su hijo de apenas 5 años. 

Rodríguez ayudaba a su suegro en la conducción de una grúa. Estuvo en el Ejército y tenía antecedentes penales por robo, de acuerdo con la versión de los familiares.