Tres de los hechos ocurrieron en el municipio Sucre del estado Miranda

CARLOS D’HOY. @carlos_dhoy / Fotografía CARLOS RAMÍREZ

A Winder Enrique Hernández de 27 años de edad, lo mató el Cicpc en un operativo, según señalan sus familiares.

Winder estaba residenciado en Nuevo Horizonte, parroquia Sucre del municipio Libertador, hasta allí llegaron las comisiones policiales buscándolo, pero él no estaba en su casa, había salido junto a su pareja, por lo que los funcionarios policiales se llevaron “detenidas” a su mamá y a su hermana de 13 años para presionar por su entrega.

Luego de varias horas, Hernández hizo una llamada telefónica y anunció que se entregaría, a cambio de que liberaran a sus familiares. Los funcionarios policiales se comprometieron al cambio y activan un operativo en el sector donde se había acordado la entrega.

Cuando llegó Winder, los policías agarraron a su esposa por el pelo y la tiraron a un lado y a Winder Hernández le dieron dos tiros en el pecho, luego se lo llevaron al hospital Periférico de Catia, centro al que ingresó sin signos vitales.

En horas de la noche liberaron a la mamá y a la hermana del joven y fue en ese momento en el que ellas se enteraron de la muerte. Era el mayor de cuatro hermanos y no deja hijos.

Darwin Pérez Clemente de 31 años de edad murió en el barrio Bolívar de Petare a las 5 de la tarde de este sábado. Estaba en su casa, cuando llegaron comisiones del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc).

Vecinos relatan que cuando llegaron al barrio lo hicieron disparando, lo que puso en peligro la vida de niños y adultos que en ese momento se encontraban en las calles.

Los funcionarios llegaron directo a la casa de Darwin, derribaron la puerta, y de inmediato le dieron un tiro, se lo llevaron al hospital Domingo Luciani de El Llanito, centro al que ingresó sin signos vitales.

Sus familiares niegan que tuviera problemas con la justicia, “él era un vendedor de frutas en la plaza El Cristo de Petare, era el tercero de cinco hermanos y deja dos hijos”.

Zaida Muñoz, esposa de Darwin, no cree que haya justicia. “Nadie va a hacer nada por él y por su memoria, nadie podrá devolvérnoslo a la familia. Ellos llegan y matan, hacen lo que quieren hacer y nadie los sanciona, nadie los castiga, nadie investiga, y nuestros familiares mueren como delincuentes, a pesar de que se trataba de personas honestas y trabajadoras”, dijo.

Dos muertos en Petare

Kelvin Joel Cabrera Colina de 23 años de edad, se dirigía junto a un amigo a su casa en su moto a las 2:15 de la madrugada de este domingo. Cuando transitaban por el sector El Mirador del Este, se percataron que en el camino habían unos sujetos asaltando, los jóvenes intentaron evadir la acción de los delincuentes y aceleraron la moto, los sujetos dispararon alcanzando a Kelvin en múltiples oportunidades y a su acompañante en el hombro.
Kelvin fue trasladado hasta el hospital Domingo Luciani donde falleció.

En otro hecho de sangre, Isaac José Jiménez Rondón de 22 años resultó muerto al recibir dos disparos en momentos en que se encontraba en el sector El Morro de Petare.

Jiménez fue mortalmente herido en el parietal izquierdo y en el pecho, luego fue trasladado por vecinos de El Morro hasta el hospital Pérez de León, centro que registró su ingreso como fallecido.

Víctimas en cifras

De acuerdo con los datos estadísticos sobre las muertes ocurridas en Caracas, obtenidos por el equipo del Monitor de Víctimas, entre los meses de mayo y septiembre un total de 249 jóvenes con edades comprendidas entre 20 y 31 años resultaron asesinados en hechos violentos en Caracas, representando el 42% del total de los crímenes perpetrados en la capital de la República, que asciende a 592 muertes violentas en el período.

57 jóvenes fueron asesinados en supuestos enfrentamientos con organismos policiales, 22% de las muertes. El segundo lugar entre las causas de muerte lo ocupa el ajusticiamiento con 53 fallecidos, seguido por los robos con 44 caídos.

Cuando se analizan los datos en relación al lugar donde ocurrieron los decesos, Petare fue la parroquia más peligrosa para el grupo, allí murieron 59 jóvenes, 23% del total. Le sigue de lejos la parroquia Sucre del municipio Libertador con 25 fallecidos. Sin embargo, al analizar las muertes por entidad federal vemos que el Distrito Capital agrupa un total de 168 asesinatos, contra 98 de Miranda.