Funcionarios de las FAES asesinaron a dos jóvenes en Petare tras las protestas

Una de las víctimas tenía antecedentes por homicidio. A ambos los vincularon con la banda del “Wileisy, uno de los pranes de José Félix Ribas, quien no pasa de los 30 años

Yohana Marra @yohanamarra / Fotografía Carlos Ramírez
27/01/19

La tarde del jueves 24 de enero, Isabel Pino, mamá de Yoendry Enrique Fernández Pino, regresó temprano a casa. Había visto videos de tanquetas en el barrio y su jefa le
permitió irse, pues la noche anterior había sido lo suficientemente aterradora luego de los enfrentamientos entre funcionarios y hombres armados, tras una protesta de vecinos en contra del Gobierno.
Al llegar a la zona 6 de José Félix Ribas, en Petare, se enteró de que su hijo, de 27 años de edad, estaba detenido por funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), que habían tomado la comunidad desde temprano. Desde entonces no lo vio más, hasta el momento de su velorio.
Ese día, alrededor de las 4:30 pm, Yoendry salió de casa de su padrino y a una cuadra, entre la zona 6 y 7, fue abordado por los uniformados encapuchados, mientras se trasladaba en su motocicleta. Los vecinos avisaron a la familia.
Trataron de pedirles información a los funcionarios, pero recibieron insultos. “Nos sacaron de ahí, luego una femenina nos comenzó a amenazar, nos pedía que nos quitáramos de ahí y yo le respondía que no me hablara de esa forma porque yo no le estaba hablando altanera”, contó Isabel.

Al retirarse por las amenazas, su madre vio desde la distancia al grupo de las FAES y el sitio donde presuntamente estaba Yoendry. Momentos después escuchó unas detonaciones.
Los funcionarios nunca les confirmaron a los familiares si lo tenían detenido o si se
encontraba herido, ellos con un mal presentimiento lo buscaron en hospitales, hasta que supieron que estaba muerto en el hospital Domingo Luciani de El Llanito.
Tenía dos impactos de bala en el pecho. Alegaron que se enfrentó a la comisión, pero su mamá lo desmintió y aseguró que ni siquiera tenía armas.
“Cuando fui a hacer la denuncia en el Cicpc me dijeron que lo mataron en un
enfrentamiento y que era de una banda. Pero eso no es así, yo les dije que era falso y ellos escribieron en la planilla “falso”. Ahí no hubo enfrentamiento, hemos visto en otras ocasiones como fingen esas cosas, una vez muertos los muchachos le ponen un arma en la mano y disparan”, dijo.
Yoendry arreglaba motos en su casa y era padre de dos niños, de seis y cuatro años. Hace dos años estuvo preso en la Mínima del Internado Judicial de Carabobo, implicado en homicidio, pero salió en libertad por beneficio. El 3 de enero de este año terminó su régimen de presentación.

Protestas dieron pie a asesinatos

La noche del 23 de enero se registraron manifestaciones en distintos sectores de Caracas, en contra de la gestión del presidente Nicolás Maduro. Palo Verde y Petare no quedaron atrás.
Luego de un cacerolazo que comenzó a las 8:00 pm, los vecinos quemaron escombros y trancaron las calles, pero esta acción fue repelida por las FAES y Polisucre con lacrimógenas y perdigones.
Según vecinos, los delincuentes se mezclaron entre los manifestantes y se enfrentaron a los funcionarios, incluso detonaron una granada cerca del elevado de Palo Verde. La zona estuvo intransitable, los habitantes escucharon ráfagas de tiros hasta pasada la 1:00 am, y vieron tanquetas.
La mañana del 24 de enero, después de esta situación, las FAES tomaron distintos barrios de Petare. En José Félix Ribas, donde mataron a Yoendry, también asesinaron a Jhonny Marcano, de 28 años de edad, a las 11:30 am.
Aunque sus parientes no quisieron dar detalles, contaron que se enteraron cuando estaba sin signos vitales en el hospital Domingo Luciani y que dejó huérfano a un niño de nueve años.
A ambas víctimas las vincularon con la banda del “Wileisy”. Sus miembros presuntamente les dispararon a los funcionarios durante los disturbios de la noche del 23 de enero.
Se conoció extraoficialmente que Wileisy es uno de los pranes de José Félix Ribas. Un joven que no pasa los 30 años.
La presencia de las FAES se mantuvo el viernes y el sábado, regresaron a las viviendas de los fallecidos y revisaron cada cuarto. A la casa de Yoendry ingresaron cuando había otros parientes quienes denunciaron que fueron agresivos.
Vecinos de Petare comentaron que los uniformados impusieron un toque de queda, quienes llegaban después de las 5:00 pm no podían ingresar al barrio porque ellos simplemente no querían.
“Los negocios han cerrado porque ellos (las FAES) toman el barrio y a la gente les da miedo. Se meten a las casas, tumban puertas, todos están asustados por esta situación”, detallaron bajo anonimato.