Sistema de protección de niños, niñas y adolescentes en silencio por caso “Los Cotorros”
Vanessa Moreno Losada | @MoreLosada24
Ha pasado una semana desde que al menos 18 personas murieron en el club Social El Paraíso, conocido popularmente como “Los Cotorros” por su vinculación con la comunidad ecuatoriana que vive en Caracas.
La mayoría de las víctimas eran adolescentes, específicamente 11 muchachos en edades comprendidas entre 14 y 17 años, pero el Sistema de Protección de Niños Niñas y Adolescentes así como la Defensoría del Pueblo, Fiscalía y el Instituto Autónomo Consejo Nacional de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (Idenna) se mantienen en silencio ante la tragedia, reporta Efecto Cocuyo.
“El silencio del sistema de protección es inadmisible“, sentenció Carlos Trapani, abogado y miembro del Centro Comunitario de Aprendizaje (Cecodap), organización que desde hace años hace seguimiento al estatus de los derechos de los niños, niñas y adolescentes.
Para el especialista, aún existen varias dudas que no han sido respondidas por las autoridades: ¿qué pasó ahí?, ¿qué pasó con los heridos?, ¿cuál fue el tiempo de respuesta de los organismos de seguridad? ¿cuál fue el rol de la Guardia Nacional Bolivariana?, ¿qué pasó con los heridos? Dice que todas estas respuestas son obligación para con la familia del Estado.
De acuerdo con la información del ministro para Relaciones Interiores Justicia y Paz, Néstor Reverol, en el Club Social El Paraíso, conocido como Los Cotorros, el sábado 16 de junio un adolescente accionó una bomba lacrimógena durante una pelea. En el lugar había cerca de 500 personas, la mayoría muchachos menores de 18 años.
A través de las redes sociales fueron convocados los invitados a la fiesta “The Legacy“, que prometía seguridad y la oportunidad a los adolescentes de ingresar al local con tan solo cancelar una multa de 60.000 bolívares; es decir, el costo de dos chupetas en puestos informales.
“La Lopnna prohíbe el ingreso de adolescente a locales nocturnos y que se les facilite el acceso al alcohol, ¿por qué estaban allí?”, se preguntó Trapani.
Agregó que la tragedia abre también la discusión sobre el acompañamiento de los padres en las redes sociales, debido a que la información de la fiesta llegó a los adolescentes en este espacio.
“¿Qué pasó con las familias que permitieron que los adolescentes fueran a este espacio? También debemos preguntarnos que papel están desarrollando los muchachos en la sociedad que tenemos y si hay suficientes espacios de esparcimiento para ellos”, expuso Trapani.
En un artículo de opinión para Efecto Cocuyo, Fernando Pereira, también de Cecodap, mostró la misma preocupación: “Nada han dicho los representantes del sistema de protección del niño y del adolescente sobre la violación a las disposiciones de ingreso de adolescentes a centros nocturnos, la ingesta de alcohol, las celebraciones de graduación (fiestas, caravanas, viajes) y qué medidas se están tomando para prevenir y/o mitigar los riesgos”.