Hallan muerto a sargento del Ejército en carretera de El Junquito
Después de estar toda la madrugada en vilo por no saber nada de su pareja, sonó el teléfono al mediodía del miércoles 9 de mayo. Lo habían hallado muerto en el kilómetro 3 de la carretera nueva Mamera-El Junquito.
Argenis Antonio Bracho Bracho, de 47 años, no regresó a casa la noche del martes 8 de mayo. En la mañana había dejado a su esposa en el trabajo y él también se fue a laborar, a bordo de su carro marca Ford modelo Fiesta, color negro. No lo vio más.
Era escolta privado y sargento segundo de Ejército, de hecho estaba en comisión de servicio. “Prestó servicio toda su vida”, dijeron parientes.
El último contacto telefónico de la pareja fue a las 5:00 p.m., después no contestó más. La mujer llamó a los compañeros de Argenis para pedirles ayuda y ellos localizaron el vehículo en Catia, a través de rastreo satelital en horas de la mañana del miércoles. Posteriormente supieron del hallazgo de su cadáver, con dos impactos de bala.
Sus familiares, quienes por medidas de seguridad prefirieron no identificarse, dijeron que le robaron todas sus pertenencias como celular, cartera y documentos.
Se presume que la autopista Mamera – El Junquito fue el sitio de liberación del cadáver, sin embargo funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) averiguan donde pudo ser interceptado.
Argenis se convirtió en el funcionario 38 asesinado en Caracas entre mayo de 2017 y marzo de 2018, según el Monitor de Víctimas, un proyecto de recolección de datos y de periodismo colaborativo. La cifra incluye a policías, escoltas y militares.
Dejó huérfanos a tres hijos, uno de ellos tiene 11 años. Vivía en el municipio Baruta con su pareja.
En menos de una semana cuatro uniformados han sido víctimas de la violencia en Caracas. El sábado 5 de mayo mataron al oficial agregado de la Policía del Municipio Baruta, Darwin Gerardo Civira Castañeda, en el sector Las Pilitas del barrio Las Cumbres en Antímano.
Ese mismo día también aseisnaron al oficial agregado de la PNB, Javier Alfredo Sánchez Meneses, de 26 años, en el sector La Tula de Carapita. Y la mañana del lunes 7 de mayo le quitaron la vida a Ericka Macías, también integrante de la PNB, en la avenida San Martín. En ese hecho resultó herido su esposo, agente del Cicpc, mientras que su hijo de cuatro años resultó ileso.